Por Juan Bravo.
Cuando George Walker Bush aterrizó en el aeropuerto de Guanajuato, allá en aquellos tiempos foxistas, tuve la errada idea de que muy pronto tendríamos las fronteras abiertas al libre tránsito entre el México del águila mocha y los Estados Unidos de las mil batallas, mil veces injustificadas.
Pensé que la reforma migratoria era inminente y para agilizar las cosas conseguí un préstamo y le di mis 2500 dólares a un "pollero" para que me instalara en territorio gringo. No necesito contarles la serie de aventuras y desventuras que se sufre para instalarse en el “gabacho”, de ese tema se conoce mucho.
Por algunos años sentí que había logrado el tan anhelado sueño americano; una “traila”, una “troca” y un empleo de 12 dólares la hora, que me ayudaron a construir un pequeño capital que mantenía y trataba de incrementarlo para cuando fuera hora de traer a la familia o de regresar al Pueblo y poner un negocio.
En Arizona viven aproximadamente 800 mil mexicanos, la gran mayoría es gente trabajadora de....
No hay comentarios.:
Publicar un comentario